Más allá de las creencias religiosas, la Semana Santa nos deja un abanico inmenso de platos típicos y tradiciones. Según la creencia católica, desde el miércoles de ceniza hasta el viernes santo, los católicos no comen carne los viernes, se considera un pecado. pero como os he dicho, más allá de las creencias, están los platos y la gastronomía de esta época.
Hoy preparamos potaje de cuaresma, un pato sencillo, con garbanzos y bacalao como ingredientes principales. Toma nota!
Ingredientes para 3 personas:
- Un bote de garbanzos cocidos – 300gr
- Dos trozos de bacalao sin espinas y desalado.
- 100 gr de espinacas frescas y limpias
- 2 patatas medianas
- 1 cebolleta mediana o una cebolla blanca mediana
- 1 cucharada de pimentón dulce
Pica la cebolla o cebolleta. Pela y gorra la patata y reserva.
Corta el bacalao en trozos d runos dos centímetros, si ves que en la superficie le queda todavía mucha sal, enjuágalo un poco con agua sin rascar para evitar que el agua entre dentro del bacalao.
A continuación sofríe la cebolla, la patata, el pimentón y puedes añadir una hoja de laurel si te gusta el sabor que aporta.
Añade el bacalao, remueve y añade seguidamente los garbanzos y dos vasos de agua (si te gustan menos espesos, añade un vaso más) Una vez empiece a hervir el guiso, añade las espinacas y deja hervir a fuego bajo unos 10-12 minutos.
Sirve caliente y si te gusta, con huevo hervido cortado por encima.
