Este año nuestra higuera ha tardado en madurar los higos, pero cuando lo ha hecho, han ido todos a una.

Tenemos tres ramas principales y cada una está injertada con una variedad. Tenemos unos higos blancos que están súper dulces, los higos negros y otros con un color morado y más pequeños que los otros. No sabemos los nombres de las variedades, pero las acabaremos averiguando.

Estoy usando los higos para hacer ensaladas, para mezclar con yogur o hacer bols con avena, pero todavía no había hecho mermelada. Así que ha llegado el momento de preparar unos tarros.
Os recomiendo tarros pequeños, tipo de paté, de pimientos rojos, de alcaparras… cuanto más pequeños mejor, así cuando abras el tarro te aseguras que lo vas a usar, o en ese mismo día, o en los siguientes tres para que no se eche a perder.
Para hacer la mermelada necesitas:
- 180gr de azúcar blanco
- 1 cucharada de zumo de limón
- 500 gr de higos pelados
Pela los higos y pártelos para asegúrate que están buenos. Haz trozos pequeños o pasa los higos por un procesador de alimentos.
Vierte en un cazo, añade el zumo de limón, y el azúcar.
Pon a fuego lento, muy lento, y remueve con cuchara o espátula de silicona. Cronometra 35 minutos.
Antes de retirar el cazo del horno, pon bajo el grifo con agua muy caliente, los tarros de cristal que quieras usar. Quítales el agua, sin secar, y añade la mermelada. Tapa el tarro y ponlo boca abajo.
Cuando el tarro esté frío, dale la vuelta y almacena.

Puedes usar la mermelada para entrantes para esta navidad. Combina muy bien con quesos y foie.
También para postres, como cobertura de tarta de queso, e incluso para hacer helados caseros.
Almacenada sin abrir dura unos 5 meses, así que ya sabes, si la haces ahora, te aguanta hasta navidad 🎄