Estar confinados con niños, implica adaptarse a todo, como dice mi amiga Ana, hay que ser agua y adaptarse a cualquier tubería. Y así estamos, en plena adaptación y buscando actividades para hacer.
Una receta para una tarde de aburrimiento es hacer una masa rápida, sin huevo y sin levadura, una masa muy versátil que te permite hacer hasta 5 recetas diferentes y que además, puedes hacer con los peques y pasar un rato entretenidos y compartiendo la cocina. Es un ejercicio de paciencia, pero también de aprendizaje y de risas. Os lo recomiendo!
Para la masa necesitamos:
- 6 gr de sal
- 200 gr de cerveza
- 400 gr de harina integral de espelta (si la quieres hacer con harina blanca, pon 450gr para que rinda mejor)
- 100 gr de aceite de oliva virgen extra.
Mezcla los líquidos y la sal hasta que se integren, y poco a poco, ves añadiendo harina tamizada y ves amasando. Al tamizar la harina evitas tirar de brazo. Si tienes Thermomix, puedes usar la función amasar durante 1 minuto y tendrás lista la masa.
Empezamos con la primera receta ROSQUILLETAS CON SEMILLAS. Hacer bolitas y churritos, a ellos les encanta, y una vez tengamos la rosquilletes hecha, la rebozamos con semillas. Quedan súper ricas!! Con ellos, habrán rosquilletas con muchas semillas y otras con casi ninguna. Cuanto más fina sea la rosquilleta, más crujiente y buena quedarán.

Reparte sobre una bandeja forrada con papel de cocina y pinta con huevo. A mi hijo la parte de pintar es la que más le gusta!! Hornea 20 minutos a 200°C y listo!!

Otra receta típica son las rosquilletas con sobrasada. La masa es la misma, ya os he dicho antes que con una masa puedes hacer 5 recetas distintas.

Estas rosquilletas también le gusta mucho hacerlas al peque, después de estirar, el momento de aplastar la masa, es su preferido. Es muy simple, estira la masa, pon la sobrasada, enrolla y listo. Puedes usar sobrasada, pero también puedes poner anchoa, atún, tomates cherry, bacon y queso… aquí las típicas son las de sobrasada, y lo que teníamos en la nevera era sobrasada, así que no había mucho donde elegir.

Pinta con aceite la rosquilleta antes meterla al horno. Y pon un poco de sal por encima. Hornea 20 minutos a 200°.
Vamos a por la tercera receta, aquí le llamamos cuadraditos aunque, los míos de cuadraditos no tienen nada. Son un tipo de rosquilleta, más plana, más salada y con pimientos dulce. A mi me vuelven loca.
En otras partes de espalda a las rosquilletas se les llama picos , legañas… aquí son todo rosquilletas. Así de fácil.
Seguimos, los cuadraditos o redonditos o alargaditos. La misma masa, estiramos, añadimos sal, aceite de oliva vienen extra y pimentón dulce. Si usas el pimentón De la Vera te va quedar más bueno, porque está ahumado y queda brutal.

Ayer mi hermana d e moría de risa cuando vio la foto de mis ‘cuadraditos’ pero oye, cocinar con niños es lo que tiene. Los conceptos se confunden, la creatividad fluye y acabamos haciendo naves espaciales… eso si, súper buenas. El tiempo de horno es el mismo, 20 minutos a 200°C

Y ya que estábamos con el horno en marcha, con un montón de pasta que nos daba para hacer 500 rosquilletas y empezaba a haber un poco de distracción… hicimos una pizza casera para cenar el peque! Ahí si que disfrutan!
Amasar, repartir el tomate, cortar champiñones, esparcir el bacon y el queso… estos momentos son los que disfrutan un montón. Acabamos con harina en el pelo, pero nada que no se solucione con agua y jabón.

Se me acabó el papel de horno. Así que con papel de aluminio improvisamos. Él hizo la pizza sobre el papel y a mi me resultó súper práctico para ponerla en la bandeja del horno.
Y ahora si, la última receta, bautizada como pizza bites y que detras esconde la historia de un fracaso… jajajajajaja. La idea inicial era hacer tipo palmerita, de hecho hice las fotos para que vieses los pasos. Estirar la masa de forma rectangular, añadir tomate frito, sal, orégano y albahaca y queso rayado por encima.

La idea era doblar por los dos lados, y así lo hice, pero el resultado no fue el esperado. Creo que enrollar por una parte mejor. Y en vez de palmeritas, hacer espirales hubiese estado bien.

De sabor están tremendas, de verdad que son bocaditos de pizza, un almuerzo perfecto para cualquier dia de la semana.
Pasamos una tarde en la cocina, aprendiendo a cortar champiñones, haciendo churritos para hacer rosquilletas, aplastando la masa para hacer las rosquilletas de sobrasada. Hemos estado entretenidos, y hemos pasado un par de horas juntos, sin riñas, sin rabietas y sin enfados.
Esta masa es una salva momentos. La usare para días fríos, lluviosos o en esos días que no sabemos ni lo que nos pasa. La cocina relaja, y une.